La innovación constante en la maquinaria forestal es clave para garantizar una productividad eficiente y sostenible en el monte. En este sentido, John Deere ha dado un paso adelante con sus autocargadores pequeños y medianos, introduciendo importantes actualizaciones que prometen mejorar significativamente su rendimiento y durabilidad.

Una de las características más destacadas de estas actualizaciones es la incorporación de nuevas opciones de brazo con una extensión de tubo. Estos nuevos brazos no solo son más robustos, sino que también presentan una extensión más fuerte, proporcionando mayor resistencia y durabilidad en el campo. Además, se ha eliminado cualquier elemento que pueda debilitarlos o hacerlos vulnerables a los daños por impacto, como agujeros, soportes u otros accesorios en la parte delantera del brazo.

Para aquellos que buscan aún más potencia, la extensión Power+ ofrece una solución aún más resistente, especialmente en el caso del brazo CF7S. Esta mejora garantiza un rendimiento óptimo incluso en las condiciones más exigentes.

Una de las preocupaciones habituales en el mantenimiento de este tipo de maquinaria es la protección de los tubos y cables. Con estas actualizaciones, los tubos y cables ahora están cubiertos por la estructura del brazo, ofreciendo una mayor protección contra daños. Además, el proceso de cambio de tubos se ha simplificado gracias a un rediseño en el tendido de los mismos, lo que facilita considerablemente las labores de mantenimiento.

Otra mejora significativa se encuentra en el cojinete de deslizamiento en el extremo posterior de la extensión. Ahora es posible lubricarlo sin necesidad de retirar las cubiertas, lo que agiliza el proceso de mantenimiento y reduce el tiempo de inactividad de la máquina.

La ergonomía y la facilidad de uso también han sido objeto de atención en estas actualizaciones. El soporte ajustable del brazo facilita el cambio a la posición de transporte, lo que mejora la eficiencia en el campo y reduce la fatiga del operador.

Niko Solopuro, director de marketing de productos de John Deere, destaca los beneficios de estas mejoras: "Los nuevos brazos ofrecen una mayor facilidad de uso, durabilidad y facilidad de servicio. La geometría mejorada proporciona un funcionamiento más suave y una productividad mejorada, lo que se traduce en una mayor rentabilidad para nuestros clientes".

Para aquellos que buscan un mayor alcance, las nuevas extensiones de tubos ocultos XI ofrecen un alcance de brazo de hasta 10 metros, lo que amplía las posibilidades de trabajo en el campo.

Solopuro también hace hincapié en la importancia del control del brazo o IBC (Intelligent Boom Control, por sus siglas en inglés), presente en el 90% de los autocargadores entregados. Este sistema amortigua los movimientos de los cilindros y detiene las cargas fuertes en las posiciones finales, lo que no solo mejora la conducción suave, sino que también aumenta la durabilidad del brazo.

Como un extra adicional, las máquinas equipadas con IBC incluyen una luz de trabajo opcional situada debajo del brazo, que mejora la visibilidad de la punta del brazo en condiciones de poca luz, garantizando un trabajo preciso y seguro en cualquier momento del día.

En resumen, las actualizaciones en los autocargadores John Deere representan un avance significativo en términos de rendimiento, durabilidad y facilidad de uso. Estas mejoras no solo benefician a los operadores, sino que también contribuyen a una agricultura más eficiente y sostenible en general.